Los cánceres de colon, mama y pulmón son, como hemos visto en la anterior entrada, algunos de los que más azotan a la población. El libro de la doctora Paula J. Fonseca y la dietista-nutricionista Sonia Martínez, ‘Remedios naturales para síntomas habituales’, recoge plantas medicinales y consejos alimenticios que pueden ayudar en la prevención del cáncer de colon, mama y pulmón.
Cáncer de colon: lo mejor para su prevención es intentar vencer el estreñimiento. Como se menciona en el libro, la Zaragotona (Plantago psyllium) puede contribuir a regular el ritmo intestinal y lograr una evacuación poco molesta. Otras plantas medicinales con efecto laxante comentadas en el libro son: achicoria, algarrobo, diente de león, frángula, linaza (semillas), malva, malvavisco, y menta. Además se recomienda comer cereales y pan integrales, legumbres, verduras y hortalizas, frutas frescas o desecadas, uvas, higos, kiwis, semillas de lino y beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día.
Puede también preparar un laxante casero fácilmente: ponga una cucharada de semillas de lino por taza de agua, eche las semillas en el agua cuando arranque a hervir, retire del fuego y mantenga 10 minutos tapado. Después filtre cuidadosamente y añada una cucharadita de miel o achicoria para mejorar el sabor. Tome un vaso en ayunas, por la mañana y por la noche.
Cáncer de mama: lo primero es conocer que lo favorecen situación asociadas con alta o larga exposición a las hormonas femeninas conocidas como estrógenos: obesidad en la menopausia, menarquia precoz, menopausia tardía, primer hijo después de los 30 años o nulípara y toma de terapia hormonal sustitutiva más de 5 años. Las mujeres después de la menopausia producen estrógenos ya no en el ovario sino en la grasa periférica. Por ello, la ganancia de peso favorece la aparición de cáncer en la mama. Para controlar el peso es bueno realizar ejercicio físico y seguir una dieta equilibrada en la que abunde la fruta y la verdura. Los alimentos que más contribuyen a a combatir la ganancia de peso son la acelga, el calabacín, el champiñón, el nabo, el pepino, el pimiento, el melocotón, el pomelo, la chirimoya y las algas. Al mismo tiempo se desaconseja ingerir alimentos ricos en grasas saturadas como la leche entera, la yema de huevo o carnes; comer fritos y bollería industrial e ingerir bebidas alcohólicas. Igualmente hay que reducir el consumo de alimentos saludables pero hipercalóricos como las frutas y los frutos secos.
Cáncer de pulmón: se debe abandonar el tabaco que es el agente causal mejor conocido y casi el único relacionado directamente con este tumor además de con el cáncer de cabeza y cuello, esófago, estómago, riñón, cervix, páncreas, vejiga, entre todos. Como se recoge en «Remedios Naturales para Síntomas habituales», el Anís Verde (Pimpinela anisum) puede contribuir al abandono del tabaco por actuar como un verdadero antídoto de la nicotina que limpia los bronquios de mucosidad irritante y facilita la regeneración de las células de las mucosas. Además, sustituye por su fresco aroma el olor a tabaco del aliento de quien acaba de dejar de fumar.
Asimismo, como también recoge el libro, la lavanda, la melisa, la pasiflora y la valeriana son buenos aliados de quien, en su deseo de reducir el riesgo de desarrollar cáncer pulmón, se propone dejar de fumar pero teme la ansiedad que le pueda causar la dependencia de dicha droga. Algunos alimentos recomendados para los problemas respiratorios son el ajo, la azufaifa, el berro, la cebolla, el dátil, el higo, el limón, la miel, el puerro y el rábano.